sábado. 18.05.2024

ESO x 1000: Un desatino sin un solo acierto

Afirma la consejera de Educación que, gracias a la ESO de los 1000 euros un elevado número de parados de nuestra región han vuelto a las aulas. Estos jóvenes que, hasta ahora estaban “condenados al abandono”, han recuperado, de esta forma, su interés por los estudios y, en concreto, por la obtención del título de Graduado en Educación Secundaria.

Afirma la consejera de Educación que, gracias a la ESO de los 1000 euros un elevado número de parados de nuestra región han vuelto a las aulas. Estos jóvenes que, hasta ahora estaban “condenados al abandono”, han recuperado, de esta forma, su interés por los estudios y, en concreto, por la obtención del título de Graduado en Educación Secundaria. Esto dice, y lo hace, además, expresando su satisfacción por que ha sido su Gobierno el pionero de tan magnífico plan, frente al desinterés de la anterior Administración educativa.

A mí me da exactamente igual de dónde vengan las buenas o las malas ideas. Si son buenas, las aplaudo. Si son absurdas, las rechazo. Y ya está; sin más adornos ni contemplaciones. Pero es que, además, no se puede ofender de esta forma y con absoluto desconocimiento a quienes hasta ahora se han ocupado de la educación en Extremadura.

Esta señora debería estar al corriente, desde el cargo que ocupa, de todos los medios que la anterior Administración Educativa ha puesto a disposición de los adultos extremeños para conseguir lo que ella ofrece ahora por 1000 euros. La preocupación que sí tuvieron sus antecesores en el cargo se puso de manifiesto en la puesta en marcha de una magnífica educación para adultos que incluye diversas modalidades, eso sí, sin ninguna remuneración económica.

Vamos a recordar cuáles son, a pesar de que ya hemos hablado de ellas en estas páginas. Si el joven interesado en la obtención del título de Graduado en Educación Secundaria está desempeñando un puesto de trabajo (algo difícil en los tiempos que corren) y no puede asistir a clases presenciales porque su horario laboral se lo impide, se le oferta la modalidad on-line, que le permite estudiar cómodamente desde su domicilio. Solo necesitará un ordenador y una conexión a Internet y la Administración pone a su disposición todo lo demás: una magnífica plataforma educativa detrás de la cual se encuentra el equipo de profesionales docentes que le ayudarán académicamente. Si se puede permitir –por razones horarias- la asistencia a una tutoría semanal, la modalidad semipresencial. Por último, si está en situación de desempleo puede asistir a clases diarias. Y, además, como ustedes ya saben, las pruebas GES para la obtención del título que se vienen desarrollando dos veces al año (en los meses de junio y septiembre).

¿Alguien da más? ¿Están de verdad nuestros jóvenes “condenados al abandono”? Esto no es solo un disparate sino también un agravio para todos aquellos que se han venido preocupando por ellos durante todos estos años hasta conseguir, repetimos, una óptima educación para adultos. No hay derecho.

¿Por qué no se dice con claridad cuántos de estos jóvenes estaban ya matriculados en los centros de adultos y, simplemente, se han cambiado a esta oferta por razones económicas? No somos capaces de encontrar ni un solo acierto en este desatino. ¿Se han sacado a profesores interinos de las listas del paro? Otro engaño más. También se les habría sacado por la vía ordinaria, es decir, impartiendo clases en los centros de adultos y en los Institutos de Educación Secundaria a estos y otros alumnos –sin incentivo económico por medio- en lugar de incrementar las ratios y reducir drásticamente los recursos.

Esto no ha sido más que un plan improvisado, no reflexionado, absurdo y que infravalora el trabajo que han venido desarrollando todos los profesionales implicados en la Educación Secundaria y, muy especialmente, en la Educación de adultos.

ESO x 1000: Un desatino sin un solo acierto