sábado. 20.04.2024

El saúco (Sambucus nigra) en la botica serrana

Estimado por sus virtudes mágicas desde tiempos remotos, se le conocía como el "árbol bueno", plantándose frente a los hogares a los que protegía. Las flores se echaban al fuego para sahumar las partes inflamadas del cuerpo y para purificar los hogares de pestilencias y mala suerte

Sambucus nigra
Sambucus nigra

Sabuco, sabugo, sayugo, canillero, sabugueiro, xabucu, o simplemente saúco, es un gran arbusto que puede alcanzar los cinco metros de altura, de copa redondeada y densa.

Su nombre deriva del griego "sambuce", que quiere decir "flauta", ya que con sus tallos huecos se han fabricado flautas desde tiempos remotos.
Vive en suelos frescos y a la orilla de arroyos de toda la Península Ibérica, actualmente también es muy apreciado para jardinería.

De corteza corchosa, agrietada y marrón claro, sus ramas se llenan de hojas muy verdes, que pierde con el frío del invierno, se trata de hojas compuestas aovadas-lanceoladas, con bordes aserrados.

Sus flores blancas son muy menuditas, pero se disponen en inflorescencias terminales aplanadas de gran diámetro que despiden en suave aroma, aparecen a partir de abril y se transforman en bayas negras al final del verano.

Las flores se recolectan por la mañana y deben secarse a la sombra en un lugar ventilado, una vez secas se vuelven de color crema y podemos guardarlas en tarros de vidrio para utilizarlas a lo largo del año.

Las hojas se recolectan mejor en primavera, de los brotes nuevos y la corteza en el otoño, preferiblemente de ramas de más de dos años, que tengan ya buen diámetro.

Virtudes

Las flores contienen una esencia de consistencia mantecosa, colina, taninos, resinas, azúcar, mucilago, eldrina, ácidos málico, valeriánico y tartárico.
En la corteza, además de la sambucina, podemos encontrar fitosterina, ácido resínico, flobafeno y ácidos esteárico y mirístico.

Los frutos contienen un 80 % de agua, pentosanas, azúcar invertido, aceite de saúco, proteinas, ácido málico, taninos y vitamina C.

Sus virtudes son innumerables, reseñando aquí las más importantes, es decir, la antiespasmódica, diurética, febrífuga, sudorífica, sedante, emoliente, astringente y expectorante.

Prepararemos una infusión con unos 12 gramos de flores secas por cada litro de agua, para sanar las afecciones respiratorias acompañadas de fiebre, en uso externo podemos utilizarla más concentrada para gargarismos, calmando así las infecciones bucales, así como practicar lavados en los ojos contra la conjuntivitis.  También podemos aplicarla sobre heridas o quemaduras, así como para lavar las hemorroides.

De la corteza prepararemos una infusión con unos 30 gramos por cada cuarto de litro de agua, tomando dos veces, seguidas espacidas por diez minutos, logrando así una acción diurética.

Con las bayas podemos preparar "vino de saúco" con un litro de vino bueno de la Sierra de Gata al que añadiremos unos 250 gramos de corteza de saúco fresca, dejándolo macerar unos quince días, filtraremos el resultado y embotellaremos en vidrio con tapón de corcho para tomarlo dos veces al día.

El denominado "arrope de saúco" se preparaba con unos 30 gramos de zumo de bayas y 60 de miel casera, cociendolo todo hasta que tome consistencia de jarabe, colaremos el resultado y lo usaremos como sudorífico y contra la gota.  Tanta fama adquirió en la antiguedad, que un anciano que alcanzó la edad de 120 años, contaba que su secreto era tomar este arrope.

Estimado por sus virtudes mágicas desde tiempos remotos, se le conocía como el "árbol bueno", plantándose frente a los hogares a los que protegía.

Las flores se echaban al fuego para sahumar las partes inflamadas del cuerpo y para purificar los hogares de pestilencias y mala suerte.

Se creía morada de las hadas y cuando se le podaba se le pedían disculpas con la siguiente frase: "Dame un poco de tu madera y yo te daré de la mía cuando crezca por fin en el bosque".  Tanto respeto se le tenía que se pensaba que caería una maldición sobre aquel que talase o podase un saúco.
 

El saúco (Sambucus nigra) en la botica serrana